Al igual que no existen lociones, cosméticos, ni fármacos milagrosos contra la caída capilar, tampoco existen tantos malos hábitos que la aceleren. La caída capilar afecta, y mucho, a prácticamente toda la sociedad. Empieza siendo una cuestión estética que llega a convertirse en una obsesión que amenaza nuestro equilibrio emocional. Antes de echarse las manos a la cabeza debemos cerciorarnos de que ya no se trata de una caída estacional relacionada con las fases de crecimiento del pelo y, por tanto necesitamos la valoración de un dermatólogo-tricólogo para que realice un diagnóstico preciso sobre la alteración que sufrimos.
Tal y como hemos informado en anteriores entradas, actualmente sólo existen tratamientos y cirugía para tratar la calvicie común. El resto, son técnicas médicas complementarias, y rutinas caseras que ayudan a mejorar el aspecto visual del cabello.
Muchas de ellas están desvirtuadas, y por eso desmontamos algunos de sus falsos mitos en otro post: https://www.clinicatecma.es/blog/423-falsos-mitos-sobre-la-caida-capilar