Alimentación infantil en verano.
Con la llegada del verano, muchos padres suelen agobiarse debido a que las rutinas se ven alteradas, la vida social, más tiempo en casa, más tiempo libre, menos madrugones y menos horarios en comidas y cenas…Por lo que los hábitos que hemos instaurado durante el año pueden tambalear.


Desde el equipo de Tecma Nutrición vamos a dar unos consejos sobre la alimentación de nuestros peques en esta época del año. 


 CONSEJOS


·Lo primero es no dejar en un segundo plano la alimentación de los niños de la casa.

1) Si hemos llevado una alimentación saludable durante el año, debemos seguir así. 
2) En caso de querer mejorarla, no posponerlo para después de verano, sino empezar ya. Cualquier momento es bueno para este propósito.


⋅Incorporar alimentos: 
El verano trae una gran opción y variedad de frutas y verduras lo que supone una excelente oportunidad para descubrir e incorporar alimentos y sabores. Por ejemplo, aquellos alimentos que se les resisten o no gustan, podemos variar la forma de presentación, y preparar recetas sanas y apetecibles juntos a modo de juego. Nuestra recomendación es optar por platos menos pesados y más fresquitos. 

⋅Los viajes pueden ser una excelente opción para que prueben alimentos y platos nuevos, visitar el mercado local, enseñarles las comidas más típicas, que las prueben y nos digan si les gusta o no.

⋅Todos a una: 
Recomendamos comer en casa todos lo mismo, padres e hijos y que les sirva de ejemplo.
Hacerles partícipes en la preparación de la comida, que nos ayuden a realizar la compra, a la preparación de los platos, etc. 
Además, consideramos que es importante crear un clima agradable a la hora de comer, evitar la televisión y “tablets”. No premiar ni castigar con la comida para evitar malas asociaciones a la alimentación. 

⋅Horarios: 
Evidentemente el ritmo de los pequeños de casa va a baja pero el intentar respetarlos al máximo sus horarios va a ayudar a no alterar su apetito. Evitar picotear antes de las comidas (papás, aceitunas, refrescos, helados, etc), nos ayudará a que las comidas principales sean de calidad. 

⋅Cuantas comidas al día: 

Debemos saber que no hay un nº necesario u óptimo de comidas al día. Seguramente habremos escuchado la frase de ‘el desayuno es la comida más importante del día, o ‘empieza el día como un campeón’, y cabe destacar que ninguna de estas afirmaciones es veraz. 
Si el niño no está acostumbrado a desayunar, no le tendremos que obligar, puesto que no es necesario hacerlo. Y si se levanta más tarde, podemos obviar el almuerzo en caso de no apetecerle ya que sus horarios no son los mismos que cuando van al colegio.  
Ahora bien, importante, realizar un desayuno nutritivo y de calidad, dejando de lado aquellos ricos en calorías vacías y llenos de ultra procesados. 
Ejemplo:  vaso de leche o bebida vegetal con cacao puro desgrasado + cereales integrales y una fruta; tortitas con crema de frutos secos y fruta; Bocadillo de aguacate o hummus o tortilla, yogur natural + fruta cortadita...etc.) 

⋅Como organizamos la comida y cena: 
En cuanto a la comida y la cena, nos puede resultar muy útil seguir el plato de Harvard. (DIBUJO)
Ejemplo: Ensalada de patata con tomate, lechuga, atún y huevo duro; Macarrones a la boloñesa (con un buen sofrito de verduras y carne picada de buena calidad de pollo o ternera)

⋅Técnicas de preparación: 
Podemos sustituir las barbacoas con carnes grasas por barbacoas de verduras, pescados azules, mariscos, patatas, etc. La plancha, el vapor, el horno, freidoras sin aceite (muy de moda ahora) y los hervidos pueden ser otra opción. 
Un buen recurso pueden ser las brochetas, “los nuggets” saludables, fajitas-wraps, etc

⋅Ejercicio: 
A más tiempo libre, los niños pueden realizar más deporte, en la playa, en la piscina, jugar con la pelota, a la palas, coger la bici, los patines… Principalmente, evitar el sedentarismo en casa todo lo posible.

⋅Hidratación: 
Hay niños que les apetece más beber líquidos fresquitos que comer. Debemos saber que la hidratación en este momento es esencial, por lo tanto,  ¿Cómo les podemos refrescar? 

·Agua: 
Como es de esperar, la primera opción por excelencia es el agua, agua fresquita con hielo y podemos innovar con aguas saborizadas con hielo y limón, naranja, fresas, etc. 


·Fruta de temporada: 

La segunda opción es ofrecer frutas de temporada, la sandía, el melón, cereza, melocotón, nectarina, níspero, piña, etc. 
Todas ellas son ricas en agua y suelen ser muy aceptadas por los pequeños. Es una opción dulce y sanísima, que además de alimentarnos bien nos pueden ayudar a refrescar. 
En formato: macedonia, fruta cortada, brochetas de frutas, smoothies con leche fresquita, granizados de fruta congelada, helados saludables. 


Para concluir, también resaltar que es importante disfrutar del verano con nuestros pequeños de casa e intentar sacarle el máximo jugo a estas recomendaciones y que ellos disfruten de este proceso. 
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